La mala circulación es el resultado de un flujo sanguíneo inadecuado a una o más zonas del cuerpo. El sistema circulatorio transporta sangre, nutrientes y oxígeno por todo el cuerpo. Cuando se reduce la circulación en una zona concreta, pueden aparecer síntomas como entumecimiento y hormigueo, hinchazón, calambres musculares y decoloración de la piel.
Afortunadamente, aumentar el flujo sanguíneo puede ser sencillo con los métodos adecuados. Aprende a mejorar la circulación en piernas, brazos y otras partes del cuerpo en esta completa guía.
Causas de la mala circulación
Una circulación deficiente puede deberse a diversos factores, desde hábitos sedentarios hasta afecciones médicas subyacentes. Algunas de las causas más comunes de una circulación débil son:
- Coágulos sanguíneos: Los coágulos sanguíneos son aglomeraciones de sangre que bloquean parcial o totalmente el flujo sanguíneo sano. Aunque pueden acumularse en casi cualquier parte del cuerpo, los coágulos de las piernas o los brazos, en particular, pueden causar problemas de circulación.
- Enfermedad arterial periférica (EAP): Con el tiempo, la arteriopatía periférica estrecha las arterias y reduce el flujo sanguíneo, sobre todo en las piernas.
- Varices: Lasvarices son venas abultadas y retorcidas de aspecto morado oscuro o azulado. Se desarrollan cuando las venas y las válvulas dejan de funcionar correctamente, lo que hace que la sangre se estanque y acumule en las piernas en lugar de desplazarse hacia arriba.
- Diabetes: Los niveles constantemente elevados de glucosa en sangre pueden desarrollar depósitos de grasa en los vasos sanguíneos. Con el tiempo, estos depósitos pueden endurecer y estrechar los vasos, reduciendo la circulación en piernas, brazos, manos y pies.
- Síndrome de Raynaud: El síndrome de Raynaud provoca frialdad y entumecimiento en los dedos de manos y pies, normalmente como respuesta a las bajas temperaturas o al estrés. Esta afección hace que las pequeñas arterias de manos y pies se estrechen temporalmente, limitando el flujo sanguíneo.
- Trombosis venosa profunda: La trombosis venosa profunda (TVP) se produce cuando un trombo -o coágulo de sangre- se desarrolla en las venas profundas de las piernas. Suele formarse cuando una persona no se mueve durante periodos prolongados, como el reposo en cama o los viajes. La TVP se agrava cuando los coágulos se desprenden, se atascan en los pulmones e impiden el flujo sanguíneo, lo que también se conoce como embolia pulmonar.
- Aterosclerosis: La aterosclerosis se produce cuando la placa -acumulación de colesterol, grasas y otras sustancias- se acumula dentro y alrededor de las paredes arteriales, reduciendo el flujo sanguíneo. Con el tiempo, la placa puede estrechar las arterias. También puede romperse y provocar un coágulo de sangre.
Las personas fumadoras, mayores de 40 años, hipertensas y sedentarias también son más propensas a tener mala circulación.
¿Por qué mejorar la circulación?
La circulación sanguínea afecta a todas las células del cuerpo. La sangre viaja por los vasos sanguíneos, enviando nutrientes y oxígeno a todos los órganos y sistemas. Las arterias transportan la sangre desde el corazón al resto del cuerpo y las venas la devuelven al corazón. Es como una red de autopistas. Cada componente trabaja conjuntamente para mantener el flujo sanguíneo y el funcionamiento óptimo del organismo.
Una circulación adecuada también proporciona los siguientes beneficios:
- Refuerza el sistema inmunitario y la capacidad para combatir infecciones
- Ayuda a que las heridas cicatricen más rápido
- Favorece la función cerebral
- Mantiene el corazón sano
- Mejora la tez
Cómo mejorar la circulación de forma natural
Si te preguntas cómo aumentar el flujo sanguíneo en las piernas de forma natural, a continuación te presentamos algunos remedios sencillos para mejorar la circulación.
1. Hidrate
Cuando se está deshidratado, el cuerpo disminuye la circulación sanguínea para almacenar energía. Para compensar, el corazón late más deprisa, lo que eleva la frecuencia cardiaca y la tensión arterial. La sangre también retiene más sodio cuando está deshidratada, lo que espesa la sangre y complica la circulación. Beber mucha agua facilita el bombeo de sangre al corazón y ayuda a que el oxígeno llegue a los músculos.
2. Usar medias de compresión
Las medias de compresión son calcetines largos diseñados para prevenir la hinchazón y los coágulos de sangre comprimiendo suavemente los músculos de las piernas y los tobillos. Estas prendas son ideales si tiene mala circulación en las piernas y los pies, o cuando viaja o permanece sentado mucho tiempo. Aunque las medias de compresión no pueden curar las varices, sí pueden ayudar a controlar las molestias asociadas a ellas.
Las medias de compresión son asequibles y se pueden adquirir en farmacias sin receta médica. Prueba a elevar las piernas mientras llevas las medias de compresión para mejorar aún más la circulación.
3. Ejercicio
La actividad física regular, sobre todo el ejercicio aeróbico, es una forma fantástica de mejorar la circulación y la salud en general. Hace que el corazón bombee con más eficacia, aumenta el flujo sanguíneo y ayuda a que la sangre fluya por las arterias.
Correr, caminar y montar en bicicleta son algunos de los mejores ejercicios para las venas. También puede probar actividades de menor impacto, como la natación y el yoga. Los ejercicios de fuerza, como levantar pesas, son otro excelente estimulante de la circulación.
4. Beber té verde o negro
El té verde y el té negro contienen potentes antioxidantes -en concreto, galato de epigalocatequina (EGCG)- que aumentan la anchura de los vasos sanguíneos, facilitan el bombeo de la sangre y previenen la acumulación de placa y la aterosclerosis en las arterias. Sólo recuerda beber con responsabilidad y vigilar tu consumo de cafeína.
5. Evitar fumar
Las sustancias químicas del humo del tabaco provocan la hinchazón e inflamación de las células que rodean los vasos sanguíneos. Esto puede estrechar los vasos y provocar diversas enfermedades cardiovasculares. Todos los productos del tabaco, incluso el tabaco sin combustión, pueden espesar la sangre y dañar las paredes arteriales.
6. Recibir un masaje
El masaje es un remedio natural para relajarse y mejorar la circulación sanguínea. Ayuda a liberar la presión acumulada en una zona específica del cuerpo. Esto facilita el flujo de sangre oxigenada a esa región, favoreciendo una circulación saludable.
7. Bañarse
Tomar un baño caliente puede ayudar a mejorar la circulación de los pies y aumentar el flujo sanguíneo en todo el cuerpo. La mejora de la circulación es uno de los muchos beneficios de la hidroterapia. El agua caliente ayuda a dilatar las venas y arterias, creando más espacio para el flujo sanguíneo. Asegúrese de que el agua no esté demasiado caliente si tiene varices, ya que puede causar dolor e irritación.
8. Consumir más hierro
El hierro desempeña un papel importante en el sistema circulatorio. Tu cuerpo necesita este mineral para crear hemoglobina, un componente principal de los glóbulos rojos que transporta oxígeno por todo el cuerpo. Considere la posibilidad de tomar suplementos de hierro o alimentos ricos en este mineral, como la carne roja y las verduras de hoja verde. Pero recuerde que un consumo excesivo de hierro puede ser contraproducente y afectar negativamente a la salud cardiovascular.
Concertar una consulta con un especialista en venas varicosas
Saber cómo aumentar la circulación sanguínea en el cuerpo es importante para su salud en general. Si padece anomalías venosas, como varices, y su circulación no mejora con los métodos de autocuidado, el siguiente paso puede ser consultar a un especialista en venas varicosas.
En United Vein & Vascular Centers, tratamos a cada paciente con las últimas tecnologías, equipos de última generación y atención compasiva. Realizamos procedimientos mínimamente invasivos vena incluyendo la ablación por radiofrecuencia (RFA), la escleroterapia y más.
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