La insuficiencia venosa crónica (IVC ) es una afección venosa frecuente en la que las venas de las piernas se dañan o debilitan, mermando su capacidad para devolver la sangre al corazón de forma eficaz. En lugar de fluir hacia arriba, la sangre puede acumularse en las piernas, provocando síntomas como hinchazón, pesadez, dolor y varices visibles. Con el tiempo, la IVC no tratada puede causar complicaciones más graves, como alteraciones cutáneas, úlceras en las piernas y formación de coágulos sanguíneos.
Uno de los riesgos más preocupantes asociados a la IVC es el desarrollo de trombosis venosa profunda (TVP), una enfermedad grave en la que se forma un coágulo sanguíneo en una vena profunda, normalmente en las piernas. La TVP puede ser mortal si el coágulo se desprende y se desplaza a los pulmones, provocando una embolia pulmonar.
Comprender la relación entre la salud de las venas y los coágulos sanguíneos es esencial para cualquier persona que padezca IVC. La buena noticia es que, con un cuidado proactivo y orientación médica, los coágulos sanguíneos pueden prevenirse a menudo.
¿Cómo se forman los coágulos sanguíneos?
Los coágulos sanguíneos son aglomeraciones de sangre que han pasado de un estado líquido a un estado gelatinoso o semisólido. Aunque la coagulación es un proceso normal que evita las hemorragias excesivas en caso de lesión, pueden formarse coágulos anormales en el interior de los vasos sanguíneos, donde pueden restringir o bloquear el flujo sanguíneo.
En los pacientes con IVC, la mala circulación y el estancamiento del flujo sanguíneo aumentan el riesgo de coagulación. Las válvulas venosas dañadas que definen la IVC hacen que la sangre se estanque en las extremidades inferiores. Cuando la sangre no se mueve correctamente, es más probable que se coagule. Con el tiempo, esto aumenta el riesgo de TVP.
¿Por qué son peligrosos los coágulos sanguíneos?
No todos los coágulos sanguíneos provocan síntomas, pero cuando lo hacen pueden dar lugar a:
- Hinchazón en una pierna (o brazo)
- Dolor o sensibilidad no causados por una lesión
- Piel caliente al tacto
- Piel roja o descolorida
Si un coágulo se desprende y viaja por el torrente sanguíneo hasta los pulmones, puede provocar una embolia pulmonar, una afección potencialmente mortal que bloquea el flujo sanguíneo a los pulmones.
Los síntomas de la EP incluyen:
- Falta de aliento repentina
- Dolor torácico que puede empeorar al respirar profundamente
- Latidos rápidos
- Mareos o desmayos
Una embolia pulmonar es una urgencia médica. Si experimenta estos síntomas, busque atención médica inmediata.
Cómo prevenir los coágulos sanguíneos si padece IVC
Si le han diagnosticado insuficiencia venosa crónica, a continuación le indicamos las medidas clave que puede tomar para reducir el riesgo de desarrollar coágulos sanguíneos:
1. Manténgase físicamente activo
El movimiento regular es crucial para fomentar un flujo sanguíneo saludable, especialmente en la parte inferior de las piernas. Al caminar, los músculos de las pantorrillas se contraen y ayudan a bombear la sangre hacia el corazón.
Intente caminar 30 minutos o hacer ejercicio de bajo impacto la mayoría de los días de la semana. Evite permanecer mucho tiempo sentado o de pie. Haz pausas cada 30 o 60 minutos.
2. Usar medias de compresión
Las medias de compresión aprietan suavemente las piernas para favorecer el funcionamiento de las venas y mejorar el retorno sanguíneo. Ayudan a reducir la hinchazón y a minimizar la acumulación de sangre, lo que puede disminuir la probabilidad de formación de coágulos. Su especialista en venas puede recomendarle el nivel de compresión adecuado a sus necesidades.
3. Elevar las piernas
Cuando descanse, intente elevar las piernas por encima del nivel del corazón entre 15 y 30 minutos varias veces al día. Esto ayuda a reducir la hinchazón y favorece la salida de la sangre de las piernas.
4. Hidrátate y mantén una dieta sana
Beber mucha agua ayuda a evitar que la sangre se vuelva demasiado espesa. Una dieta equilibrada rica en alimentos antiinflamatorios -como verduras de hoja verde, bayas, frutos secos y ácidos grasos omega-3- puede favorecer la salud vascular y reducir el riesgo de coagulación.
5. Tomar los medicamentos prescritos
Si corre un riesgo elevado de sufrir coágulos, el médico puede recetarle medicamentos anticoagulantes. Estos medicamentos reducen la capacidad de coagulación de la sangre y también pueden utilizarse si ya ha sufrido una TVP. Tome siempre los medicamentos según las indicaciones y notifique a su médico cualquier efecto secundario.
6. Conozca las señales de advertencia
Familiarícese con los síntomas de la TVP y la EP. La detección precoz puede evitar complicaciones graves. Si nota dolor inusual en las piernas, hinchazón o dificultad para respirar, acuda inmediatamente al médico.
Opciones de tratamiento para la insuficiencia venosa crónica
La prevención de los coágulos sanguíneos es sólo una parte del tratamiento de la IVC. El tratamiento de los problemas venosos subyacentes puede mejorar drásticamente la circulación y reducir el riesgo de complicaciones.
En United Vein & Vascular Centers, ofrecemos varias opciones de tratamiento mínimamente invasivo para tratar la IVC, entre ellas:
Ablación endovenosa con láser (EVLA)
Este procedimiento guiado por imagen utiliza una fina fibra láser para calentar y sellar la vena dañada. La sangre se redirige de forma natural a las venas sanas cercanas. La EVLA es rápida, requiere poco tiempo de inactividad y puede reducir significativamente los síntomas de la IVC.
Ablación por radiofrecuencia (ARF)
Similar a la EVLA, la ARF utiliza energía de radiofrecuencia para cerrar las venas enfermas. Es una opción eficaz y segura que alivia los síntomas a largo plazo.
Microflebectomía
Este procedimiento elimina las varices a través de pequeñas punciones en la piel. Suele realizarse en el consultorio con anestesia local y deja cicatrices mínimas.
Por qué es importante un tratamiento rápido
Sin tratamiento, la IVC puede progresar, aumentando la probabilidad de complicaciones como úlceras en las piernas, infecciones cutáneas y coágulos sanguíneos. Cuanto más tiempo permanezca la sangre en las venas, mayor será el riesgo. Por eso es tan importante una intervención precoz, ya sea mediante cambios en el estilo de vida, terapia de compresión o procedimientos médicos.
Acuda a un especialista en venas varicosas
En United Vein & Vascular Centers, nos especializamos en el diagnóstico y tratamiento de condiciones de la vena como CVI con compasión y experiencia. Si usted ha estado luchando con síntomas como hinchazón en las piernas, dolor o venas visibles, o si usted tiene un historial de coágulos de sangre, podemos ayudarle a tomar medidas proactivas para mejorar su salud vascular.
Cuando se reúna con nuestro equipo, recibirá un plan de tratamiento personalizado diseñado para:
- Mejorar la circulación sanguínea
- Reducir el riesgo de coágulos sanguíneos y otras complicaciones
- Te ayudan a moverte con más libertad y comodidad
- Mejore su calidad de vida a largo plazo
Demos juntos el siguiente paso
Tanto si te acaban de diagnosticar IVC como si llevas años viviendo con problemas venosos, debes saber que no estás solo. Nuestra misión es ayudarle a sentirse mejor, vivir de forma más activa y reducir los riesgos para su salud.
Con más de 45 centros repartidos por Arizona, Chicago, Colorado, Florida, Georgia y Texas, le facilitamos el acceso a una atención venosa experta cerca de casa.
No espere para dar prioridad a su salud venosa. Póngase en contacto con United Vein & Vascular Centers hoy mismo para programar su consulta y dar el primer paso hacia una circulación más segura y una salud vascular más fuerte.
Preguntas frecuentes
Sí. La insuficiencia venosa crónica puede aumentar el riesgo de formación de coágulos sanguíneos, sobre todo de trombosis venosa profunda, debido al escaso flujo sanguíneo en las piernas.
En los casos graves no tratados, la IVC puede provocar complicaciones graves, como úlceras que no cicatrizan o infecciones que pueden poner en peligro la salud de las extremidades. Sin embargo, esto es poco frecuente y puede prevenirse con los cuidados adecuados.
Sí. La IVC es un factor de riesgo conocido de TVP porque las venas dañadas pueden provocar la acumulación de sangre y la formación de coágulos en las piernas.