Contenido
- Enfermedad arterial periférica (EAP)
- ¿Qué es la aterectomía?
- ¿Cuándo se utiliza la aterectomía para la arteriopatía periférica?
- Tipos de procedimientos de aterectomía
- El procedimiento de aterectomía: Paso a paso
- Beneficios de la aterectomía para la arteriopatía periférica
- Recuperación y cuidados posteriores
- Aterectomía frente a otros tratamientos de la arteria periférica
- ¿Es la aterectomía adecuada para usted?
- Avanzar en el tratamiento de la arteriopatía periférica
- Preguntas frecuentes
La arteriopatía periférica (arteriopatía periférica ) es una enfermedad grave que se desarrolla cuando el estrechamiento de las arterias restringe el flujo sanguíneo a las piernas y los pies. Esta reducción de la circulación puede causar dolor, calambres y, en casos avanzados, complicaciones importantes.
La aterectomía es una opción de tratamiento mínimamente invasiva que elimina la placa acumulada en el interior de las arterias para restablecer un flujo sanguíneo más saludable. Suele considerarse cuando otros métodos, como la angioplastia o la colocación de stents, no son eficaces o adecuados.
Saber cuándo y por qué puede recomendarse la aterectomía puede ayudar a los pacientes a sentirse más seguros en sus decisiones asistenciales. En este artículo explicaremos cómo funciona el procedimiento, describiremos sus ventajas y riesgos y lo compararemos con otros tratamientos de la arteriopatía periférica.

Con la información adecuada, podrá comprender mejor sus opciones y tomar medidas significativas para proteger su salud vascular y mejorar su calidad de vida.
Enfermedad arterial periférica (EAP)
La arteriopatía periférica afecta a millones de personas en todo el mundo. Se produce cuando las arterias situadas fuera del corazón o el cerebro se estrechan debido a la acumulación de placa. Esto restringe el flujo sanguíneo, afectando principalmente a las piernas y los pies.
Los síntomas habituales de la arteriopatía periférica son dolor en las piernas, calambres y debilidad al caminar. A menudo se confunden con el envejecimiento normal, pero pueden indicar algo más grave. Si no se trata, la arteriopatía periférica puede provocar complicaciones graves, como isquemia crítica de las extremidades o incluso su pérdida.
Los factores de riesgo de la arteriopatía periférica son el tabaquismo, la diabetes, la hipertensión y el colesterol alto. Reconocerlos permite intervenir precozmente y reducir el riesgo de complicaciones.
El diagnóstico suele implicar una combinación de historia clínica, exploración física y pruebas como el índice tobillo-brazo (ABI). El ABI compara la presión arterial en el tobillo y el brazo para evaluar el flujo sanguíneo.
El tratamiento se centra en mejorar el flujo sanguíneo y controlar los síntomas. Incluye cambios en el estilo de vida, medicación y procedimientos como la aterectomía. Conocer la arteriopatía periférica le permitirá buscar un diagnóstico precoz y un tratamiento adecuado.
¿Qué es la aterectomía?
La aterectomía es un procedimiento mínimamente invasivo diseñado para eliminar la placa de las arterias. Este procedimiento es vital en el tratamiento de la arteriopatía periférica. Al eliminar la placa, la aterectomía mejora el flujo sanguíneo en las arterias afectadas, aliviando los síntomas de la arteriopatía periférica, como el dolor y los calambres en las piernas.
Existen diferentes dispositivos de aterectomía, cada uno de ellos adecuado para condiciones arteriales específicas. Estos dispositivos pueden ser rotacionales, direccionales, láser u orbitales. La elección del dispositivo depende de la localización y las características de la placa, lo que garantiza unos resultados óptimos.
El procedimiento consiste en utilizar un catéter para acceder a la arteria afectada. El diseño del catéter incluye una punta especializada para cortar o vaporizar la placa. Estos restos se eliminan del torrente sanguíneo y la arteria queda limpia.
La aterectomía, a menudo realizada con anestesia local en un hospital o en régimen ambulatorio, se ve favorecida por su reducido tiempo de recuperación. Su eficacia aumenta cuando se combina con otros tratamientos, como la angioplastia o la colocación de stents.
¿Cuándo se utiliza la aterectomía para la arteriopatía periférica?
La aterectomía se considera cuando otros tratamientos de la arteriopatía periférica no son adecuados. Es una alternativa viable cuando la angioplastia o la colocación de stents han fracasado o no son recomendables.
Este procedimiento suele adaptarse a pacientes con placas complejas. Entre ellas se incluyen las muy calcificadas o las situadas en zonas de difícil acceso. En estos casos difíciles, la aterectomía ofrece un método preciso para eliminar la placa.
Un especialista vascular puede sugerir la aterectomía cuando los síntomas afectan gravemente a la vida cotidiana. Los síntomas pueden incluir dolor en las piernas, calambres o incluso heridas que no cicatrizan. Tratar estos problemas puede mejorar sustancialmente la calidad de vida del paciente.
Tipos de procedimientos de aterectomía
Los procedimientos de aterectomía se presentan en diversas formas, cada una de ellas adaptada a diferentes afecciones arteriales. La elección depende de las características de la placa y de factores específicos del paciente. Comprenderlos puede ayudar a determinar el método más adecuado.
Se suelen utilizar cuatro tipos principales de procedimientos de aterectomía. Estos incluyen:
- Aterectomía rotacional: Utiliza un dispositivo giratorio para triturar la placa.
- Aterectomía direccional: implicaun dispositivo de corte para eliminar la placa en una dirección específica.
- Aterectomía láser: emplea energía láser para vaporizar la placa.
- Aterectomía orbitaria: Utiliza una corona recubierta de diamante para lijar la placa.
Cada procedimiento tiene ventajas distintas. La aterectomía rotacional suele elegirse para la placa dura y calcificada. La aterectomía direccional permite la eliminación precisa de la placa. La aterectomía láser es eficaz en localizaciones difíciles de la placa. La aterectomía orbital permite la eliminación uniforme de la placa en toda la arteria.
La decisión sobre qué tipo utilizar se toma en colaboración con un profesional sanitario. Se evalúan factores como la localización y la densidad de la placa para garantizar unos resultados óptimos. Se anima a los pacientes a discutir estas opciones en detalle, para comprender mejor su tratamiento.
El procedimiento de aterectomía: Paso a paso
El procedimiento de aterectomía está diseñado para ser mínimamente invasivo. Comienza con la administración de anestesia local por parte del médico. Esto adormece la zona y garantiza su comodidad durante el procedimiento.
Una vez que la anestesia hace efecto, se practica una pequeña incisión. A través de esta incisión, se introduce un catéter en la arteria. El catéter sirve de guía para que el dispositivo de aterectomía llegue al lugar obstruido.
A lo largo del procedimiento se utilizan herramientas de diagnóstico por imagen, como la angiografía. Éstas ayudan a visualizar la arteria y garantizan una navegación precisa hasta la obstrucción. Este paso es crucial para el éxito de la aterectomía.
A continuación, el dispositivo de aterectomía específico se acopla a la placa. Según el tipo utilizado, puede cortar, lijar o vaporizar la placa. El objetivo es eliminar la obstrucción y restablecer eficazmente el flujo sanguíneo.
El procedimiento completo suele durar entre una y dos horas. Tras la eliminación de la placa, el catéter y el dispositivo se retiran con cuidado. Por último, se cierra la incisión para dar por concluida la intervención. La mayoría de los pacientes pueden marcharse el mismo día, iniciando una rápida recuperación.
Beneficios de la aterectomía para la arteriopatía periférica
La aterectomía ofrece numerosas ventajas a los pacientes con arteriopatía periférica. Es un procedimiento mínimamente invasivo, lo que significa menos dolor y una recuperación más rápida en comparación con la cirugía abierta.
Uno de los principales beneficios es la mejora significativa del flujo sanguíneo. Al eliminar la placa, la aterectomía alivia síntomas como el dolor y los calambres. Esto mejora la movilidad y la calidad de vida en general.
Esta combinación de ventajas hace de la aterectomía una opción atractiva para muchos pacientes con síntomas de arteriopatía periférica.
Recuperación y cuidados posteriores
La recuperación tras una aterectomía suele ser rápida, lo que permite a los pacientes reanudar pronto sus actividades cotidianas. El procedimiento es mínimamente invasivo, lo que contribuye a acortar el período de recuperación. La mayoría de los pacientes se reincorporan a sus actividades habituales a los pocos días.
Un tratamiento postoperatorio eficaz es esencial para obtener los mejores resultados. Implica seguir al pie de la letra los consejos médicos y acudir a las citas de seguimiento. Esto ayuda a garantizar que la arteria cicatrice correctamente y mantenga un flujo sanguíneo mejorado.
Aterectomía frente a otros tratamientos de la arteria periférica
La aterectomía es sólo una opción entre los diversos tratamientos de la arteriopatía periférica (arteriopatía periférica). Es especialmente útil cuando la acumulación de placa es compleja o resistente a otras intervenciones. En comparación con la angioplastia o la colocación de stents, la aterectomía elimina directamente la placa, lo que puede ser ventajoso en determinados casos.
Al considerar el tratamiento de las arterias periféricas, es importante comprender las diferencias:
- Aterectomía: Elimina la placa directamente de las arterias.
- Angioplastia: Abre las arterias estrechadas inflando un globo.
- Colocación de endoprótesis: Mantiene las arterias abiertas con un pequeño tubo de malla.
Cada tratamiento presenta ventajas y riesgos específicos. Su profesional sanitario puede ayudarle a determinar la opción más adecuada en función de su enfermedad y sus necesidades.
¿Es la aterectomía adecuada para usted?
Para determinar si la aterectomía es adecuada, hay que tener muy en cuenta su estado de salud específico. Para conocer el mejor tratamiento para su arteriopatía periférica, es fundamental consultar a un profesional sanitario.
Avanzar en el tratamiento de la arteriopatía periférica
La aterectomía es una opción eficaz y mínimamente invasiva para los pacientes con arteriopatía periférica, que ayuda a restablecer el flujo sanguíneo y mejorar la calidad de vida. En comparación con la cirugía tradicional, ofrece un enfoque más suave con resultados prometedores.
La decisión sobre el tratamiento adecuado debe ser un proceso de colaboración con su equipo de atención médica. En United Vein & Vascular Centers, estamos aquí para guiarlo en cada paso del camino, asegurándonos de que tenga la información y el apoyo necesarios para tomar decisiones seguras para su salud vascular.
Programe una consulta hoy para explorar si la aterectomía es la opción correcta para usted.
Preguntas frecuentes
La aterectomía es un procedimiento mínimamente invasivo que elimina la placa de las arterias estrechadas, restaurando el flujo sanguíneo sano y ayudando a reducir el dolor y las complicaciones asociadas a la arteriopatía periférica.
Los pacientes con arteriopatía periférica que no han respondido a la medicación, la angioplastia o la colocación de stents pueden ser candidatos ideales. Un especialista vascular evalúa cada caso para determinar el abordaje más seguro y eficaz.
La aterectomía puede mejorar la circulación, reducir los síntomas y favorecer un estilo de vida más activo. Aunque en general es segura, puede presentar riesgos como hemorragias, lesiones arteriales o infecciones, que el equipo médico analizará antes del tratamiento.